Aparentemente, viajar es fantástico para la salud mental. Y cuando digo "viajar" no me refiero a tomar el vuelo de las 6 am de Spirit Airlines a Las Vegas. Me refiero a comer setas mágicas.
Numerosos estudios han descubierto que la psilocibina, una droga de Lista 1 y el compuesto psicoactivo de los hongos, es un tratamiento muy eficaz para la depresión, la ansiedad, el trastorno de estrés postraumático, la adicción a la nicotina y el alcoholismo.
A medida que se difunden las noticias sobre la promesa de la psilocibina, su estatus legal está cambiando en los EE. UU.
En 2020, Oregón aprobó una legislación estatal que despenaliza los hongos mágicos. El estado del noroeste del Pacífico también está construyendo un marco para regular el uso terapéutico legal de la psilocibina, convirtiéndose en la primera jurisdicción del mundo en hacerlo.
Más recientemente, ciudades de California, Washington, Colorado, Michigan y Massachusetts han seguido el ejemplo y despenalizan las setas. Para ser claros, despenalización no significa legalización. Simplemente significa que no será procesado por posesión.
También está ganando fuerza el impulso internacional para una reclasificación de la psilocibina. ¿Podría la terapia psicodélica ser la próxima gran tendencia en el tratamiento de la salud mental? Si las regulaciones se flexibilizan aún más, creo que podría ser así.
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